La vida es un misterio que hay que vivir y no un problema que hay que resolver...
La ignorancia afectiva que vamos arrastrando se puede dividir en dos conceptos; "problemas y misterios”. Cuando abordamos un problema puede que no sepamos la solución, pero tenemos intuición un conocimiento cada vez mayor y ciertas ideas de qué andamos buscando en la vida. Cuando nos enfrentamos a un misterio, sin embargo, sólo podemos quedarnos mirando fijamente, maravillados como hacen los niños en una tienda de juguetes sin querer saber qué aspecto tendrá una explicación… Nuestras vidas están llenas de enredos de índole psicológico, que absorben nuestra atención y que convertimos en objetos de nuestro pensar…acudimos a la fuente de donde parten esos pensamientos que nos entretienen. La figura creada como el observador que mira desde la distancia lo que ocurre no es más que el pensamiento pensante...y eso, es un misterio, como también lo es el pensamiento de nuestra presencia en la vida, nuestro destino, el amor o la muerte también son un misterio y no deberíamos c...