Las Heridas...
Crecimos creando corazas, tapando-nos con frías mantas de " no me importa". Los adultos que nos acompañaban en ese momento pensaron que quizás " aquello" no nos había dolido tanto, o que no era para tanto...porque de adultos lo olvidaríamos ...
Y sí, seguimos creciendo, aunque un poco cojos, un poco menos nosotros un poco...
La Vida, está acostumbrada a tirar adelante a pesar de todo, es su misión seguir y seguir sin importar como estemos nosotros o si podemos o no, llevar su ritmo...
Nosotros también sobrevivimos. ¡ Como no! y solo los que de verdad quisieron mirar en nuestros ojos, aquellos que nos amaron, vieron que las heridas seguían ahí, intactas y activas.
Creímos haber olvidado las heridas...y nada nos hacía pensar que fuesen ellas las que nos guiaban por la vida. Nuestras heridas eligieron a nuestra pareja, también a nuestros grandes amigos. Y cuando creyeron que era el mejor momento - sin consultarnos -, decidieron que era tiempo de actualizarse en nuestro interior. ¿ Donde está el dichoso botón de apagado?
Quizás con la llegada de nuestro primer hijo, quizás en aquella relación de pareja...para cada cual el escenario es diferente pero no la herida, ellas permanecen ahí, obstinadas en volver a la superficie, sacando la peor versión de nosotros mismos. Y fue justo cuando nosotros nos entendimos aún menos.
Y pretendimos, sin éxito alguno, volverlas a enterrar con más fuerza...
Nunca hubiésemos creído que trabajaban a nuestro favor. Las viejas heridas del pasado solo querían una nueva oportunidad para encontrar un mejor lugar donde guardarse,más cobijadas más en calma...
Aquellas experiencias tan dolorosas tuvieron que esconderse sin un verdadero amparo afectivo,sin una verdadera comprensión de lo vivido, y lo hicieron rápidamente bajo la alfombra, o en un portazo en el armario de la habitación más oscura.
Y quizás ahora te están diciendo que es el momento...
Que necesitan encontrar un nuevo lugar en tu corazón. Un lugar donde te ayuden a ser más sabio, más compasivo y amoroso.
Esas heridas, transformadas en cicatrices curadas, serán tu gran contribución a este mundo.
Tu sello personal. Sí, tus heridas son también tus mejores regalos...solo necesitan que ya no las escondas. Necesitaron tiempo, y ahora aire, para Sanar, y quizás también que alguien te mire con afecto...
Sin ese vinculo, tus heridas no sabrían encontrar el camino al gran lugar que les espera.
Comentarios
Publicar un comentario
Gracias por dejarme tu respetuoso comentario.